miércoles, 6 de febrero de 2013

Mejora tu postura en el baile

Mejorar la postura es un proceso que requiere de mucha disciplina, observación y entendimiento. No basta con corregir tu postura cada vez que tu espalda se encorva o tu cabeza se inclina demasiado hacia el frente.
Si quieres mejorar tu postura en el baile, es necesario que mejores tu postura en tu vida. Primero es esencial que identifiques tus problemas posturales más comunes. Después, debes incluir ejercicios en tu rutina que gradualmente te ayuden a sanar tus malos hábitos de postura.

Una buena postura depende de muchos elementos que funcionan juntos para crear el mejor balance posible. No puedes mejorar la postura enfocándote en una sola parte del cuerpo.

Sin embargo, si te enfocas en la columna vertebral, la espalda y la cabeza, podrás sanar la causa de los problemas posturales más comunes.

Descubre las curvaturas de la columna vertebral.

Para mejorar la postura, es necesario que aprendas a sentir las curvaturas naturales de tu columna vertebral. Los malos hábitos de postura más comunes casi siempre crean tensiones que sacan a estas curvaturas de su posición natural.
Las curvaturas naturales de tu columna vertebral se encuentran en el cuello, el tronco y la espalda baja. En una buena postura estas curvaturas se mueven con fluidez, manteniendo su línea natural.

Mejora tu postura practicando ejercicios para la columna vertebral todas las semanas. Estos ejercicios deben ser ejercicios que liberen las tensiones que se acumulan en esta zona y ayuden a la columna vertebral a ser más flexible.

Los ejercicios que se concentran en flexionar la espina dorsal hacia adentro y hacia afuera son excelentes, ya sea de pie o acostado en el suelo. Puedes encontrar este tipo de ejercicios en el Método Alexander, en Pilates y en las posturas de Yoga. Las siguientes posturas de Yoga son excelentes:

Las 12 posturas del Saludo al sol

Perro mirando hacia abajo

Cobra
También es importante que observes en tu diario vivir, cuando te mueves, la relación que existe entre la pelvis y la columna vertebral. Permite que estas partes del cuerpo se muevan de una manera natural mientras caminas, bailas o haces cualquier actividad física.

Una vez adquieras consciencia acerca de las curvaturas naturales de tu espina dorsal, se te hará más fácil corregir la postura de todo tu cuerpo, tanto en tu diario vivir como en el baile.

Ejercita y relaja los músculos de la espalda

Una buena postura depende mucho de los músculos de la espalda. Si los músculos de la espalda están muy tensos o muy débiles, éstos no pueden cumplir con su función de sostener la espalda en una postura adecuada.
A menudo los problemas de encorvamiento en la espalda surgen a consecuencia del mal funcionamiento de los músculos dorsales. Los malos hábitos de postura también debilitan y estresan los músculos de la espada, creando un círculo vicioso.

Una espalda tensa no te permite tener una buena postura y una mala postura ocasiona tensiones en la espalda. Una espalda con músculos débiles no puede sostener una buena postura y una mala postura podría debilidar los músculos de la espalda.

Para romper este círculo vicioso, incluye en tu rutina ejercicios que fortalezcan, estiren y relajen los músculos de la espalda. Practica ejercicios al menos dos veces por semana que fortalezcan todos los grupos musculares de la espalda, incluyendo los trapecios (ubicados en la parte posterior del cuerllo y la parte superior de la espalda), y los músculos del pecho.

Estos ejercicios para la espalda deben ser básicos y moderados. Siempre deben ser seguidos por ejercicios que relajen tu espalda. De hecho, los ejercicios de Yoga son excelentes porque cumplen con las tres funciones de fortalecer, estirar y relajar. Los siguientes ejercicios de Yoga son beneficiosos para tu espalda:

Torsión dorsal

Postura de la Diosa

Parada de hombros
Alinea tu cabeza con el cuello y los hombros.

En una buena postura tu cabeza debe estar centrada con el cuello y los hombros. No debe estar ni demasiado inclinada hacia el frente o hacia atrás, ni virada hacia la izquierda o derecha.
Parece lógica esta posición. Sin embargo, no siempre se mantiene ni en la vida ni en el baile. Uno de los problemas más comunes de postura es la inclinación excesiva de la cabeza hacia el frente.

A menudo esto sucede cuando la parte superior de la espalda tiene la tendencia de encorvarse hacia adentro. Las personas que pasan mucho tiempo sentadas frente a una computadora suelen tener esta tendencia. Este mal hábito de postura en la cabeza ocasiona mucho estrés y tensión en los músculos del cuello. Para sanar estos problemas posturales:

Hazte consciente de la posición que tiene tu cabeza cuando estás sentada/o, especialmente si trabajas muchas horas frente a una computadora. Establece la disciplina de revisar la postura de tu cabeza cada media hora.

Si te encuentras con la cabeza muy inclinada hacia una dirección, centra tu cabeza. Mira el frente y pon la bartilla en linea pararela al suelo. Siente las siete vértebras de tu cuello elevadas hacia arriba. Busca el punto medio de la línea horizontal imaginaria que cruza los hombros y centra tu cabeza en ese punto.

Practica ejercicios para el cuello que liberen las tensiones de la zona cervical. Las rotaciones de cuello a ritmo lento coordinadas con la respiración son excelentes. Muchas posturas de Yoga que se ejecutan de pie también son excelentes para mejorar la postura del cuello y de la espina dorsal completa, como la Postura del árbol y la Postura de la montaña.

10 consejos aprender cualquier tipo de baile


10 consejos que te doy para que aprendas a bailar cualquier tipo de baile de salón
Sigue el lema preparar tu cuerpo, mente y alma para facilitar tu aprendizaje de baile

He aquí 10 consejos claves para aprender a bailar cualquier tipo de baile. No importa la edad que tú tengas ni tu peso ni la forma de tu cuerpo, tú puedes aprender a bailar con ayuda y la actitud adecuada. Sigue estos tips con pasión y disciplina. ¡Y poco a poco aprenderás a bailar con gracia!
1. Date permiso para bailar.

El primer paso para aprender a bailar es una acción interna. Quizás has soñado con bailar desde hace tiempo, pero no te atreves a matricularte en una clase de baile por miedo a hacer el ridículo.
Respira profundamente y conéctate a tu alma, a ese aspecto de tu yo que ahnela expresarse mediante el baile. Sonríe por dentro y dile a esa parte tuya: “Te doy permiso para aprender a bailar y te ofrezco el ambiente y los recursos necesarios para que puedas aprender de una manera amorosa”.

2. Encuentra la maestra o maestro de baile ideal para ti.

La instructora o instructor de baile adecuado para ti no solamente enseña pasos y técnica de baile. También es una persona que apoya tu aprendizaje con positivismo, paciencia, respeto, consejos y entusiasmo. Es una persona que te apoya para que tú descubras y liberes a tu bailarín o bailarina. 
Dáte tiempo para encontrar una clase de baile con el maestro y la maestra que mejor se adapte a tus necesidades, personalidad y preferencias. Si estás en una clase de baile donde no sientes apoyo para crecer, busca otra clase.
3. No te compares con tus compañeros de clase.

No caigas en la trampa de la envidia. Cada estudiante de baile tiene un ritmo de aprendizaje diferente. Cada persona tiene sus puntos fuertes y sus puntos débiles. No pierdas el tiempo sintiéndote menos que tus compañeros de clase porque ellos parecen avanzar más que tú.
Enfócate en lo que aprendes en cada clase y celebra cada uno de tus logros, por más pequeños que sean. Si tienes compañeros de clase que son buenos bailarines, ínspírate con ellos. Quizás ellos puedan revelarte algunos secretos y trucos para aprender a bailar de una manera más fácil.
4. Practica lo aprendido en tu casa.

Todos los procesos de aprendizaje requieren de muchísimas horas de práctica y estudio. Saca tiempo varias veces a la semana para practicar lo que aprendes en tu clase de baile.
En estas prácticas fortalecerás tus destrezas.También te darás cuenta de lo que necesita atención y de lo que todavia está confuso. Entonces sabrás en qué aspectos tienes que enfocarte en la próxima clase.
5. Desarrolla una disciplina de calentamiento y estiramiento.

El instrumento para el baile es tu cuerpo. Los ejercicios de calentamiento y estiramiento, cuando se hacen a diario, le dan a tu cuerpo la flexiblidad y fuerza necesarias para que puedas bailar con precisión y fluidez.
No te limites a hacer estos ejercicios solamente cuando tienes clases de baile. Lo mejor es establecer una rutina diaria de ejercicios de calentamiento y estiramiento. Puedes escoger disciplinas que te proporcionen estos beneficios como Yoga o Pilates.
6. Establece una disciplina de relajación.

El estrés, las preocupaciones, una vida demasiado ajetreada, las emociones y los pensamientos negativos afectan tu cuerpo y su capacidad para bailar con armonía. Para liberar tu cuerpo de estos efectos, incorpora a tu vida una disciplina de relajación.
Si escoges el Yoga como tu disciplina fisica, estarás matando dos pájaros de un tiro, porque el Yoga relaja todo tu cuerpo. También puedes practicar una técnica de meditación. y/o mimar tu cuerpo con masajes y baños aromáticos.
7. Presta atención a tu postura.

La postura es de suma importancia en todos los tipos de baile. Observa cuáles son las zonas de tu cuerpo que te sacan de alineamiento. La espalda, el cuello, la pelvis y toda la espina dorsal son zonas claves para mantener una postura saludable.
Incluye en tu disciplina física ejercicios que ayuden a liberar las tensiones de todas estas zonas en el cuerpo. Este tipo de ejercicios te ayuda a desarrollar consciencia acerca de tu postura. Aprenderás a identificar cuándo tu postura está fuera de alineamiento y a hacer los ajustes necesarios para recuperar la buena postura.
8. Acude a presentaciones de baile.

Tu pasión por el baile necesita nutrirse con el baile que crean los grandes bailarines y coreógrafos. Acudir a una presentación de baile que te gusta puede motivarte a que sigas adelante con tu aprendizaje.

9. Estudia los videos de tus bailarines favoritos.

Disfrútalos para tu propia inspiración. Obsérvalos con detenimiento para aprender más acerca de diferentes estilos, interpretaciones y técnicas de baile.
10. Disfruta cada minuto.

Aprender a bailar es un proceso arduo que requiere de mucha dedicación y persistencia. No te enfoques demasiado en los resultados. Disfruta el momento presente. Recibe el deleite del baile en cada paso y movimiento.